sábado, 11 de junio de 2011

Echo de menos tu piel bronceada, tu dulce sonrisa, tan buena para mi, tan perfecta,
Y cómo me agarrabas de los brazos aquella noche de Septiembre, la primera vez que me viste llorar.
Puede que sea una ilusión, probablemente un sueño sin sentido, si nos volviéramos a querer, te juro que te amaría bien.
Volvería atrás en el tiempo y lo cambiaría pero no puedo, así que tu puerta está cerrada, lo entiendo.


Pero aquí estoy yo tragándome mi orgullo,
Delante de ti diciéndote que me arrepiento.