lunes, 20 de agosto de 2012

Decidí que nadie es tan bueno, ni tan malo como para ser imborrable.
Entendí aquella persona que se fue dejándote ahogada en lágrimas, sabiendo el dolor de su abandono, no te merece. 
Todo se supera de a poco, todo deja de doler; las sensaciones siempre renuncian. 
Decidí sembrar tulipanes sobre tanta tierra que se ha cruzado en mi camino. 
Todo instruye, todo deja una lección; la traición del más querido, siempre enseña... 
Decidí que no hay tiempo para sentirme mal. 
Por que soy especial, 
por que valgo demasiado y..
El tiempo es corto. Las horas se deslizan. Los días nunca retornan. 
Decidí celebrar la vida sin detenerme en motivos. 
El corazón late y es suficiente...