lunes, 13 de agosto de 2012

Sé que no hay monstruos en el armario, que los reyes magos no te vigilan para ver todo lo malo que haces, sé que los malos son muy malos, y los buenos no son tan buenos. Créeme, que he aprendido que los conciertos están para dejarse los pies, y la voz. Que los besos a escondidas saben mejor. Que un baño de agua fría a veces sienta tan bien como uno de agua caliente. Que el mundo está plagado de personas agradables, y a la vez, de personas que no merecen ser llamadas personas. Ahora sé que no hay calcetines para el pie izquierdo, ni para el pie derecho. Que las medias se rompen muy fácilmente. Y lo más importante, sé que de siete días a la semana, yo te quiero ocho